Cuáles son las etapas de crecimiento de los niños

El crecimiento de los más pequeños es una de las principales preocupaciones de los padres. Los niños crecen a su ritmo, pero es difícil saber si ese ritmo es el adecuado, a no ser que se conozcan previamente las etapas de crecimiento de los niños. Hay momentos en los primeros años de vida de un menor en que el crecimiento es muy rápido y se nota casi de un día para otro, pero en otras fases es mucho más lento. Como no se trata de un proceso constante, se pueden definir cuatro etapas en el crecimiento de los niños que se cumplen en la mayoría de los casos.

Las cuatro etapas de crecimiento de los niños

Según el tipo de crecimiento de los niños, son estas cuatro las etapas que pueden diferenciarse en sus primeros años de vida.

Crecimiento del bebé

Al nacer, los bebés tienen una medida media de 49,5 centímetros, dependiendo de su sexo y de su gestación. Durante su primer año de vida, el bebé triplica su peso y llega a crecer unos 25 centímetros, que es prácticamente la mitad de su medida al nacer. Esta etapa del crecimiento es la más acelerada, y no vuelve a darse en ningún momento de la vida. Al final de su primer año, el niño medirá de media unos 75 centímetros, aunque esta proporción varía dependiendo de la medida del bebé al nacer.

Transición a niño

Entre los dos y los tres años tiene lugar la etapa de transición, donde el crecimiento se ralentiza levemente pero también es muy notable. Se estima que durante el segundo año se crece unos 12 centímetros de media, y durante el tercer año esa proporción baja hasta los 8 centímetros de crecimiento de media.

Crecimiento lento

A partir de los 4 años, y hasta que el menor entre en la etapa de desarrollo puberal, el crecimiento se estabiliza y decrece en ritmo. La ganancia de peso será de entre 2 y 3 kilos por año, y el crecimiento será de 6 centímetros de media hasta los cinco años, y 4 centímetros cada año a partir de los seis años.

Pubertad

Al entrar en la pubertad, el crecimiento vuelve a mostrarse acelerado. En esta etapa, más que el crecimiento prima el desarrollo y maduración sexual, que es lo que más cambios provoca en el cuerpo de los niños. La etapa de la pubertad dura aproximadamente seis años, tiempo en que cada niño gana de media 30 kilos de peso y puede aumentar entre 9 y 12 centímetros de altura al año.

En cualquier caso, no hay que obsesionarse con el crecimiento de los niños, y simplemente observar que se realiza de una forma constante y proporcional a la edad que tiene. 

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