viernes, 20 de mayo de 2016

Recupera tu figura tras el parto

La vida cambia con el nacimiento de un hijo y, a menudo, también lo hace el aspecto físico de la mujer. El embarazo y también la lactancia producen cambios importantes en el cuerpo que a veces son difíciles de recuperar. A esto se une que la edad de tener hijos se ha retrasado notablemente en los últimos años y ya es habitual que mujeres con más de cuarenta años decidan ser madres incluso por primera vez. Dado que a estas edades la capacidad de recuperación de la piel y de los músculos no es la misma, es más habitual que se recurra a la cirugía estética para conseguir recuperar un buen aspecto físico.
En la clínica de cirugía estética drlalinde.com cuentan con un programa específico para mujeres después del embarazo, conocedores de la gran demanda que existe en este terreno. Pero ¿qué es lo que una mujer puede necesitar tras haber tenido un hijo? Estos son algunos de los problemas más habituales y que tienen respuesta con la cirugía estética:
- Problemas en la zona abdominal. El volumen del vientre cambia mucho durante el embarazo y si la piel no tiene la suficiente elasticidad es posible que tras dar a luz y perder peso queden excesos que no es posible mejorar si no es mediante una intervención. También es frecuente la aparición de estrías que en algunos casos son muy antiestéticas.
Los músculos abdominales también pueden perder parte de su firmeza haciendo que el vientre no sea tan estético como solía ser incluso si se ha recuperado el peso inicial. Este problema también puede solucionarse con una intervención estética.
- Problemas en los pezones. En algunas ocasiones, cuando hay variaciones muy notables de volumen en las mamas los pezones pueden acabar situados por debajo del surco submamario. Esto produce un efecto muy feo que se puede corregir con una elevación de mamas.
- Variaciones en el volumen de los pechos. Mientras que algunas mujeres una vez que han dado el pecho se encuentran con que han perdido incluso dos tallas de sujetador otras deben de enfrentarse al problema contrario.
En el caso de la reducción de busto el problema no es tan solo haber perdido volumen, sino que la piel está fofa, vacía y las mamas se caen. La colocación de implantes mamarios que rellenen ese espacio perdido devolverá al pecho su aspecto de siempre.
Si el pecho ha aumentado demasiado de tamaño también puede ser un problema estético además de una complicación de salud por dolores de espalda. En estos casos se puede valorar una reducción de mamas.

Como se puede ver, hay alternativas para todos los problemas. Lo importante es tener expectativas reales sobre los resultados que se van a obtener. Por eso, sea cual sea el problema, es fundamental consultar con un buen cirujano que pueda ofrecer soluciones realistas al problema.

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